El Videomapping interactivo va más allá de la recepción pasiva al crear una experiencia inmersiva y comunicativa. Sólo a través de la participación activa de los visitantes, a través de su uso lúdico, la obra cobra vida. Los destinatarios pasivos se convierten en jugadores creativos. En esta intalación interactiva de videomapping los usuarios deben moverse, saltar y por lo tanto, llevar al edificio y a ellos mismos a bailar.